Orejas gallegas de Carnaval. Lleváis años viendo este dulce por la red y todavía no lo habéis probado solo puedo decir una cosa: ya estáis tardando. Yo andaba como vosotros y no veía el momento de ponerme a ello hasta apenas una semana y, oye, que ya estoy pensando en repetir. Ni que decir tiene que intuía que me iba a gustar. Soy muy fan de los dulces tradicionales, los postres fritos y todo lo que lleve anís entre sus ingredientes. Presa fácil, que se dice. Así que, si vuestros gustos son como los míos, poneos a ello ya. Me lo agradeceréis.
Fácil hasta decir basta, el único aquel que tienen las orejas gallegas de Carnaval es que hay que dejar la masa lo más fina posible. Algo que se soluciona con un par de pasadas más de rodillo y listos. Además de la receta a la manera tradicional, más abajo os indico también cómo hacer estas orejas gallegas de carnaval con Thermomix, por si preferís hacerla con robot.
Indice
Aunque ya poco se sigan las tradiciones de estas fechas, hace años el Carnaval era la última oportunidad de ponerse ciego a comer y otros vicios antes de cumplir el ayuno y abstinencia de la Cuaresma. De ahí vienen las orejas gallegas y muchos otros dulces propios de Carnaval, pestiños, flores, chulas, nudos fritos, frixuelos, casadielles, buñuelos, que han sobrevivido las modas y nos siguen endulzando estas fechas.
Todos ellos son frutas de sartén, es decir, postres y dulces elaborados en este utensilio. Antiguamente la mayoría de casas carecían de horno así que, o se acudía al horno comunal o panadería, o se recurría a la fritura. Una alternativa fácil y barata.
Las orejas son tradicionales tanto en el entroido gallego como en el leonés, también conocidas en otras partes de España como hojuelas. Son, como ya he avisado, sencillas de preparar y de adaptar a los gustos de cada cual. Anís u orujo, manteca de cerdo o aceite, azúcar y canela o miel, entre otras alternativas. Nadie nos impide usar otros licores, otras grasas, otras maneras de finalizar las orejas, ni otras especias con las que aromatizar la masa. La elección es nuestra.
Para preparar unas orejas gallegas no hace falta ser un experto repostero. Tan solo hay que mezclar los ingredientes de la masa, estirar en pequeñas láminas y freír. Algo perfectamente alcanzable. ¿Cómo lo veis?
- 1 huevo M
- 1 cucharada de azúcar
- 50 g de leche, agua o zumo de naranja
- 50 g de mantequilla fundida o a temperatura ambiente, aceite de girasol o manteca de cerdo
- 2 cucharadas de anís o esencia de anís al gusto
- Ralladura de 1 limón
- 260 g de harina
- 1 cucharadita de levadura (opcional)
- Aceite vegetal para freír
- Azúcar glasé
- Canela molida (opcional)
- Mezclamos todos los ingredientes, menos la harina y la ralladura de limón, en un recipiente hondo.
- Incorporamos la ralladura de limón y la harina poco a poco, removiendo entre añadido y añadido. Debemos obtener una masa manejable, elástica y ligeramente grasa que envolvemos en papel film y dejamos reposar una hora.
- Tomamos pequeñas porciones de la masa y las extendemos con ayuda del rodillo lo más finas posible, como una hoja de papel.
- Calentamos abundante aceite en una sartén para freír, a temperatura medio-alta, en tandas de tres o cuatro.
- Dejamos escurrir sobre una fuente con papel absorbente.
- Espolvoreamos con azúcar glasé y/o canela molida antes de servir.
- Colocamos todos los ingredientes en el vaso del Thermomix excepto la ralladura de limón y la harina y programamos 20 segundos, velocidad 4.
- Añadimos la harina y la ralladura de limón y amasamos 1 minuto, velocidad espiga.
- Envolvemos la masa en papel film y dejamos reposar una hora.
- Tomamos pequeñas porciones de la masa y las extendemos con ayuda del rodillo lo más finas posible, como una hoja de papel.
- Calentamos abundante aceite en una sartén para freír, a temperatura medio-alta, en tandas de tres o cuatro.
- Dejamos escurrir sobre una fuente con papel absorbente.
- Espolvoreamos con azúcar glasé y/o canela molida antes de servir.
- La grasa. Podemos usar mantequilla, manteca de cerdo, un aceite que sea suave, como el de girasol, o una combinación de varias de estas grasas.
- El líquido. Agua, leche y zumo de naranja son solo tres opciones. Atreveos a innovar con otros líquidos. Hay muchas versiones de las orejas, todas buenas y con su toque personal.
- El aroma. La ralladura de limón aportara sabor y también el anís, pero cualquiera de los dos puede ser sustituido. Probad con ralladura de naranja, orujo, kirsch, brandy, etc.
- La masa tiene que quedar lo más fina posible para que las orejas queden crujientes. No tengáis miedo a dar otra pasada más al rodillo.
- Si vais con prisas podéis obviar el reposo de la masa, aunque os costará un poco más estirar la masa bien fina. El reposo la vuelve más elástica.
- La masa se puede preparar el día anterior o por la mañana y freír las orejas por la tarde. El exceso de reposo no altera el resultado, aunque conviene meterla en la nevera.
- El aceite de la fritura se puede aromatizar calentándolo durante 10 minutos con una estrella de anís, la piel de limón, una rama de canela o unas semillas de matalahúga, que se retira antes de freír.
Las orejas gallegas de Carnaval son de esos dulces que entran por si solos con una facilidad pasmosa. Empiezas con una, pasas a la segunda y, antes de darte cuenta han desaparecido unas cuantas del plato. Son geniales para la sobremesa, como acompañantes de un café, infusión o chupito de licor.
Otras recetas dulces tradicionales
No os penséis más lo de hacer estas orejas gallegas de carnaval. Son sencillísimas, deliciosas y la masa cunde un montón. Tendréis dulce para acompañar muchas sobremesas, dar y regalar.
Noelia dice
Tienen buena pinta, pero a mi gusto te han quedado muy tostadas. En mi casa tenían un color más amarillo, no tan doradas. Por lo demás tendré que mirar en mi libro de Picadillo la receta base, que es la que nosotros usábamos.Muchísimas gracias por tan buen post.
Carmen dice
Hola Noelia, gracias por tu comentario. En casa nos gustan los fritos tirando a tostados, es una cuestión de gustos. La próxima vez que las haga (que será en breve) probaré a dejarlas más doraditas como haces tu. A ver si nos gustan más, menos o igual 🙂
Saludos, Carmen
Las recetas de Tere dice
Querida Carmen, que ricas tienen que estar, como siempre, todo un lujo!! Bss
Carmen dice
Hola Tere, la verdad es que son muy ricas y fáciles de preparar. Nada que no puedan hacer otros. Anímate que seguro que os gustan!