Erase una vez un bizcocho jugoso, muy jugoso.
Un bizcocho morenito de marcado sabor y suave textura que allá por donde pasaba dejaba huella.
Un bizcocho atractivo y llamativo que, consciente de su encanto y del placer que causaba entre aquellos que lo probaban, un buen día se planteó llegar más lejos deseando ser tarta de cumpleaños.
Cuando el protagonista de nuestra historia, este que tan guapetón luce en las fotos que adornan la entrada de hoy, me contó sus planes me resultó bien fácil visualizar lo que quería. En seguida me di cuenta cuenta de su potencial como base de una tarta de cumpleaños de modo que me puse manos a la obra para ayudarle a conseguir su sueño y, con un ganaché de chocolate y unas bolitas de caramelo plateadas, lo puse bien hermoso.
La receta del bizcocho la saqué del blog de Chelo, Cogollos de agua, y la del ganaché de chocolate es la que siempre uso y que tengo publicada aquí.
Iris Cosme Gomez dice
Dónde está la receta??? después d tan magnifico cuento y d hacerle la boca agua. La recetaaaaaaaaa???????
Amalia dice
Aun estoy esperando.. estamos eb 2019 jaja
Saludos
Carmen dice
Hola Amalia,
La receta está en el enlace que aparece en el post. Quizás no lo has visto. Mira en el último párrafo 🙂
Un saludo,
Carmen