«Hola, me llamo Carmen y, desde hace unos cinco o seis años, soy adicta a los dulces con frutas».
Es curioso cómo nos cambian los gustos a lo largo de nuestra vida. Hace no mucho tiempo, si hubiera tenido que elegir un dulce o un postre, me habría decantado por un buen trozo de pastel de chocolate o similar. Ahora, sin embargo, ni siquiera contemplaría la idea. Si entre las opciones hay un dulce que contiene fruta, garantizado que ese va a ser mi elección.
Es por esto que hace unos días, mientras miraba absorta las estanterías de la biblioteca de mi municipio, y estudiaba todos y cada uno de los libros de cocina disponibles, mis ojos se pararon en seco ante un pequeño libro titulado «Postres con fruta», de la editorial Larousse y su colección 100% placer.
Ni que decir tiene que el librito en cuestión se vino conmigo a casa, que en cuestión de 24 horas me lo he estudiado a base de bien (contiene sólo 60 recetas) y que ya tengo marcadas varias que me gustaría hacer.
Esta ha sido la primera. Un bizcocho jugoso y sano que hará las delicias de los amantes de las ciruelas.
La verdad sea dicha es que, con un nombre tan poco original, no esperaba gran cosa pero me ha sorprendido gratamente superando con creces mis expectativas. Esta es una receta que viene sin foto en el libro y no me podía imaginar ni por lo más remoto que el resultado fuese a ser tan bonito visualmente…eso sin hablar del sabor que es…mmmmmmaravilloso.
Necesitamos (para un molde de 32 x 23 cm)
- 200 grs de mantequilla a temperatura ambiente
- 800 grs de ciruelas
- 200 grs de azúcar moreno
- 4 huevos
- 250 grs de harina de trigo
- 1 cucharadita de levadura en polvo (tipo Royal)
- Azúcar glas
Preparación
Lavamos las ciruelas, las secamos y partimos por la mitad. Extraemos los huesos y volvemos a partir cada trozo en dos mitades. Reservamos.
Engrasamos con mantequilla un molde para horno. Lo espolvoreamos con harina y retiramos el exceso colocándolo boca abajo sobre la pila para no ensuciar.
Pre-calentamos el horno a 180 ºC (función turbo).
En un bol, ponemos la mantequilla y el azúcar. Removemos hasta conseguir una consistencia homogénea.
Añadimos los huevos, uno a uno, batiendo cada vez hasta su total incorporación. Añadimos la harina, poco a poco, tamizándola encima de la mezcla y sin dejar de remover. Por último, agregamos la levadura y mezclamos bien.
Vertemos la masa en el molde y la alisamos con ayuda de una espátula extendiéndola por toda la superficie del molde (es una masa espesa). Colocamos los trozos de ciruela sobre la masa. Durante la cocción se hundirán en ella como se puede ver en las fotos.
Horneamos durante 45 minutos aproximadamente.
Sacamos el bizcocho del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla antes de desmoldarlo. Antes de servir, lo espolvoreamos con azúcar glas.
Notas:
- Si, durante el horneado, notamos que la superficie se dora demasiado y aún no ha transcurrido el tiempo completo de cocción, cubrimos el bizcocho con papel de aluminio para evitar que se queme y se seque.
- El tiempo de horneado dependerá de cada horno y del tipo de molde que se utilice, por lo que es importante comprobar el grado de cocción pinchando la masa con la punta de un cuchillo. Si, al retirarlo, sale limpia es que el bizcocho está listo para retirarlo del horno.
¿Te apetece un trocito? |
Enjoy &…¡feliz día!
Deja una respuesta