Hoy vuelvo a retomar mi sección de cocina británica.
Hacía tiempo que no publicaba ninguna de sus recetas y ya tocaba. Me hubiera gustado hacerlo antes pero ultimamente he participado en varios retos y concursos y no me ha sido posible. Ya sabéis la cantidad de tiempo que ello conlleva (no os cuento nada nuevo) y he descuidado un poco mis propias actividades.
Espero compensar la espera con esta receta tan deliciosa: bizcocho crumble de peras y moras.
Contundente, con cuerpo, jugoso y en su punto de dulzor. Lo podemos tomar en el desayuno, en la merienda o servirlo como postre acompañado de una bola de helado o nata montada.
Sea como sea que decidáis tomarlo, seguro que no os deja indiferentes.
Necesitamos (para un molde de 12 x 25 cms)
- 175 grs de mantequilla sin sal
- 150 grs de azúcar moreno (+ una cucharada)
- 3 peras peladas y cortadas en láminas
- 150 grs de moras
- 3 huevos batidos
- 200 grs de harina de trigo
- 2 cucharaditas de polvo para hornear (tipo Royal)
- 150 grs de queso fresco batido (queso crema o crème fraiche)
Para el crumble
- 100 grs de mantequilla sin sal derretida
- 100 grs de azúcar moreno
- 1/2 cucharadita de canela (opcional)
- 150 grs de harina de trigo
- 100 grs de copos de avena
Preparación
1º la fruta
En una sartén, fundimos 25 grs de mantequilla y le añadimos 1 cucharada de azúcar. Removemos durante 1 minuto y agregamos la pera. Dejamos cocer a fuego lento durante 8 minutos. Añadimos las moras y cocemos un par de minutos más. Dejamos enfriar y reservamos.
2º el crumble
Mezclamos la mantequilla con el azúcar, la canela, la harina y los copos de avena. Reservamos.
3º el molde
Engrasamos el molde con mantequilla y espolvoreamos con harina. Colocamos papel vegetal en la base de modo que sobresalga por los lados (así podremos tirar del sobrante y desmoldarlo facilmente).
4º el horno
Pre-calentamos el horno a 175 ºC (función turbo).
5º el bizcocho
En un cuenco grande, batimos el azúcar con la mantequilla hasta que blanquee. Agregamos los huevos y removemos hasta que se hayan integrado.
Añadimos la harina y el polvo para hornear, poco a poco mientras removemos con una cuchara de metal. Por último, y cuando tengamos una mezcla homogénea, agregamos el queso y mezclamos bien. El resultado es una masa densa y más espesa que la de otros bizcochos que haya preparado anteriormente.
6º el montaje
Vertemos dos tercios de la masa en el molde y, con ayuda de una cuchara, la extendemos bien por toda su base intentando nivelarla lo mejor posible. Cubrimos con la mitad de la mezcla para el crumble.
A continuación, vertemos el resto de la masa y la nivelamos de nuevo. Extendemos la fruta y, por último, añadimos el resto del crumble.
7º el horneado
Horneamos durante 1 hora y media. Comprobamos su punto después de la primera hora por si se estuviera dorando demasiado por la superficie (en cuyo caso lo cubriríamos con papel de aluminio) y para ajustar el resto del tiempo de horneado (podría ser que necesitara menos de media hora a partir de este momento o más).
Retiramos del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla durante unos 20 minutos antes de desmoldar.
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